El empresario de 68 años, uno de los más poderosos de Argentina, era dueño del Banco Macro y también tenía acciones dentro del sector inmobiliario, agropecuario y energético.
Jorge Horacio Brito, el banquero de 68 años fallecido este viernes en un accidente de helicóptero en la provincia de Salta, fue un empresario argentino dueño del Banco Macro y también de acciones en el mercado inmobiliario, agropecuario y energético.
Brito era actualmente el CEO de Banco Macro, una de las principales entidades financieras de capitales nacionales que operan en el mercado argentino. También tenía negocios inmobiliarios a través de la empresa Vizora; agropecuarios con Inversora Juramento S.A, Frigorífico Bermejo y Cabaña Juramento; y energéticos con la compañía Genneia S.A.
Por su mayor influencia en el sector bancario desde 2003 y hasta 2016 también fue presidente de la Asociación de Bancos Argentinos (ADEBA), cuando pidió licencia y fue reemplazado por Daniel Llambías. Y además entre 2012 y 2014 fue titular de la Federación Latinoamericana de Bancos (FELABAN).
Actualmente el holding del Banco Macro está formado por Macro Bank Limited; Macro Securities S.A. Sociedad de Bolsa; Macro Fiducia S.A.; Banco Privado de Inversiones S.A. y Macro Fondos S.A; Macro Securities; de la Fundación Macro Bansud y de Sud Inversiones y Análisis. Y debido a su tamaño, se lo considera uno de los bancos privados más grandes de Argentina.
En 2017 la revista Forbes ubicó a Brito en el puesto 1.567 del ranking global de multimillonarios, y en ese momento era la séptima persona más rica de Argentina. Al año siguiente descendió a la décima posición con un patrimonio de US$ 1.500 millones de dólares, y en 2019 bajó al puesto 21 con una fortuna de 690 millones de dólares.
Jorge Brito supo negociar con todos los gobiernos desde el retorno de la democracia en 1983, y durante la primera época del kirchnerismo entre 2003 y 2015 logró un gran crecimiento económico. Sin embargo, desde la asunción de Alberto Fernández había empezado a quejarse de las decisiones del gobierno nacional sobre política económica. También se había expresado en contra del denominado “impuesto a la riqueza”, y por este motivo había llamado a una especie de “rebelión fiscal”.
La trayectoria empresarial de Brito comenzó en 1976 fundando una compañía financiera junto a su cuñado y con un capital de apenas US$ 10.000, pero rápidamente llegó a su primer millón.
Denuncias y problemas judiciales
A raíz de la revelación de los “Panamá Papers”, la prensa reveló el dato de que Brito también había abierto una sucursal del Banco Macro en Bahamas, uno de los territorios de ultramar del Reino Unido que están considerados como paraísos fiscales. Esta filial es el mencionado Macro Bank Limited.
Además, diferentes medios señalaron que el banquero fallecido este viernes fue un gran aportante de campaña de Mauricio Macri y que se benefició con varias licitaciones tras la llegada de éste al gobierno nacional a fines de 2015.
Brito también estuvo involucrado en la famosa causa Ciccone, aunque finalmente fue sobreseído por el juez federal Ariel Lijo. Esto fue luego de que en 2018 Alejandro Vandenbroele declarara que el director del Banco Macro era uno de los encargados de buscar financistas para la adquisición de la imprenta, y también denunciar que el banquero le abonaba una mensualidad y honorarios de abogados para “comprar” su silencio.
En aquel momento esta causa judicial provocó el alejamiento de Brito como máxima autoridad del Banco Macro, un cargo al que había retornado este año y en el que se mantenía hasta su fallecimiento de este viernes por la tarde en un accidente del helicóptero en el que viajaba por la provincia de Salta.
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