La conversación telefónica ocurrió a fines de 2014 y tuvo como protagonistas al por entonces secretario penal del Juzgado Federal de Corrientes, Pablo Molina, y a su esposa y a un ex novio de ella.Lo concretó con el aval del juez federal Carlos Soto Dávila, ambos a su vez procesados por proteger a narcotraficantes.
Molina está en libertad desde marzo, pero está vinculado a la causa. Los fiscales detectaron la situación.
Algunas de las conversaciones que surgen de los CD con las escuchas que estaban en el escritorio de Molina:
"Ciclotímica de mierda, yo tampoco voy a hablar con vos. Me voy a cagar matando hoy, hija de puta".
"Me encajaste un chumbo en la cara. ¿Vos sos consciente de lo que provocaste en mí, Pabli?".
Molina pidió a la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) que escuchara estas charlas.
El fiscal Flavio Ferrini habló con En el aire y mencionó que hay una nueva persona a cargo del juzgado, con una nueva manera de trabajar, el doctor Vallejos quien pidió una serie de relevamientos y aparecieron CD que supuestamente eran de una causa pero no estaban resguardados en el marco de esa causa. Se escucharon y se dieron cuenta que era la voz de Molina y pasaron a la fiscalía para que se investigue.
"Se trata de funcionarios públicos que se avalan de eso para llevar a cabo algo ilegal, un avance a la intimidad de dos personas en base a una cuestion particular dibujado en una causa por drogas", expresó Ferrini.
Afirmó que solicitaron la imputación tanto del ex juex federal Soto Davila como de su secretario Molina.
