El imputado, un remisero llamado Julio Argentino González, estaba imputado en un juicio que concluyó este lunes en el Tribunal Oral Federal de Corrientes, luego de que el 14 de julio de 2017 fuera atrapado en un hotel de Paso de la Patria llamado “Brisas del Paraná”.
Hasta allí condujo a cinco mujeres para un encuentro sexual con nueve turistas; las víctimas fueron rescatadas y declararon en el juicio.
El fiscal federal Carlos Schaefer en su alegato repasó que el imputado se aprovechó de circunstancias de severas dificultades económicas por las que atravesaban las mujeres, las captaba a cambio del 50% de los importes que percibían.
Desde el programa oficial de rescate de víctimas de trata, una de las especialistas al declarar como testigo indicó que “se pudo advertir claramente la cosificación de la mujer (…) reducida a un objeto comercializable”.
Según el expediente al que tuvo acceso Corrientes en el Aire, González manejaba un grupo de más de 15 mujeres de entre 19 y 25 años y se lograron pruebas de que también explotó sexualmente a menores de edad.
E incluso se indicó que hay elementos para sostener que tenía “contactos” para que la policía le garantice “impunidad” en el traslado de las víctimas hacia los hoteles.
En su sentencia de hoy, los jueces del Tribunal además de condenar a 10 años de prisión al imputado, ordenaron el decomiso de dinero y del automóvil Volskwagen Vento en el que realizaba los traslados.